En primer lugar, debemos aclarar que en el momento actual, el proceso de configuración de la Confederación Municipalista está abierto y sin definir completamente. Estamos trabajando en la constitución de esa red o Confederación. Quedan aún muchos planteamientos por pulir y decidir entre todas.
Lo que sí es una evidencia es que queremos compartir un método, un ADN y unas características básicas (primarias abiertas y proporcionales, código ético, toma de decisiones radicalmente democrática). Colaboraremos con cualquier candidatura municipalista que quiera asumir y compartir estas premisas básicas.
La Confederación es una red de apoyo e intercambio de experiencias entre diferentes agrupaciones municipalistas. Eso es principalmente lo que pretende ser y lo que por ahora está definido. Es evidente que podemos llegar a convertirnos en una estructura jurídica dependiendo de si definimos el proyecto a corto, medio o largo plazo.
El apoyo de los partidos a candidaturas municipalistas ha sido una fórmula de éxito en diferentes ayuntamientos ya que se ha logrado dejar atrás las dinámicas de reparto de cuotas y, al mismo tiempo, se ha logrado incorporar toda la experiencia y el saber acumulado por gente que lleva mucho tiempo participando en organizaciones políticas.
En muchos municipios, nuestras iniciativas contaron con el apoyo de formaciones del cambio como Podemos, Izquierda Unida, Equo y formaciones análogas. En la mayoría de los municipios estamos de acuerdo. Pero lo que debe quedar claro es que este bloque municipalista ofrece estrategias y funcionamiento diferentes al resto de partidos estatales aunque compartamos objetivos comunes.
Esta sería la mejor forma de incorporar a los partidos tradicionales a una candidatura de este tipo. En todos aquellos pueblos y ciudades en los que la ciudadanía tenga la capacidad de constituirse en candidatura municipalista, la Confederación Municipalista será la opción legítima del cambio que pretendemos trasladar a las instituciones.
En líneas generales, estimamos que la gestión ha sido honesta y aún estamos a tiempo de revertir dinámicas que, en ocasiones, llevan décadas implantadas. Sin embargo, creemos que hay que pelear con más determinación para arrebatar el poder a las élites locales y poder implantar una gobernanza democrática.
Como estructura interna, somos una confederación de candidaturas de pueblos y ciudades, ¡nada más y nada menos!. Las candidaturas tendrán la máxima autonomía dentro de una estrategia compartida.
Para nosotras es imprescindible asumir los principios del “Código de buenas prácticas” y del “Código Ético”, algo que por otra parte no excede de los que la mayoría de nosotras ya tenemos en nuestros respectivos colectivos.
Los colectivos que formamos parte de la Confederación Municipalista compartimos numerosos puntos programáticos a partir de los cuales trabajaremos para impulsar iniciativas comunes aunque adaptadas a la realidad de cada territorio.
No creemos en los acuerdos por arriba, entre la cúpula y los aparatos de los partidos, pactados en la oscuridad de los despachos institucionales. Creemos en los procesos de constitución de candidaturas electorales que incluyan partidos pero abiertos a la participación de la ciudadanía y siempre desde abajo.
Somos, como nuestro nombre indica, una Confederación de candidaturas, que se adhieren libremente y que participan de las iniciativas de manera consensuada, horizontal e igualitaria.
En la actualidad estamos presentes trece ciudades impulsando este proyecto. Queremos ser muchas más para poder debatir entre todas cual es la fórmula legal más apropiada para este proyecto.
Esta red de colectivos municipalistas tiene vocación de ser amplia y mayoritaria, y sobre todo participativa en la toma de decisiones. El grupo promotor es solo eso, gentes con necesidades y planteamientos políticos comunes que desean llevar adelante un proyecto amplio e inclusivo.
Seremos todas, las que estamos y las que están por llegar, quienes definamos de forma consensuada la fórmula legal que deba tener esta Confederación.